El artículo 27 de la ley universal de los derechos humanos dice: "Toda persona tiene derecho a tomar parte libremente en la vida cultural de la comunidad, a gozar de las artes y a participar en el progreso científico y en los beneficios que de él resultan".
Esta ley es bastante esclarecedora del tema que tratamos pero a menudo se antepone el "dinero".
El derecho de autor es un conjunto de normas y principios que regulan los derechos morales y patrimoniales que la ley concede a los autores (los derechos de autor), por el solo hecho de la creación de una obra literaria, artística, científica o didáctica, esté publicada o inédita. Se basa en la idea de un derecho personal del creador sobre su obra y, como derecho moral se considera que es una emanación de la persona del autor.
El símbolo del copyright "©" es usado para indicar que una obra está sujeta al derecho de autor.
Históricamente ha existido discusión sobre el derecho de autor y la tecnología digital introduce un nuevo nivel de controversia en la política de este derecho.Internet facilita la elusión de la ley de derechos de autor por la facilidad que ofrece para llegar a millones de usuarios y participantes en lo que hemos llamado la cultura de la remezcla.
Con la promulgación del tratados de Copyright de
Las grandes empresas pretenden seguir monopolizando su poder manteniendo los derechos de autor basándose en el derecho a la propiedad intelectual y moral.
Esto conlleva a discusiones, acciones legales, etc. que repercuten en la propia idea de lo que supone compartir en la red, es decir, la creatividad colectiva.
Existen movimientos a favor de suavizar los derechos de autor como Creative Commons en el mundo anglosajón, una ONG sin ánimo de lucro que desarrolla planes para ayudar a reducir las barreras legales de la creatividad, por medio de nueva legislación pero sin que desaparezca el derecho de autor.
Por el contrario el Movimiento Devolucionista surge en el mundo latino pretendiendo acabar con las patentes y con el copyright, argumentando que siempre han servido para frenar el desarrollo económico y cultural de los países pobres. Critican a Creative Commons, por considerar que su trabajo se limita a un acto de buena voluntad y que exclusivamente puede servir para las industrias culturales.
Algunos comentaristas como Barlow (1994) han argumentado que los derechos de autor digitales son fundamentalmente diferentes y seguirán siendo persistentemente difíciles de aplicar, mientras que otros como Stallman (1996) han argumentado que Internet socava profundamente los fundamentos económicos de los derechos de autor. Estas perspectivas pueden conducir a la consideración de sistemas alternativos de compensación en lugar de derechos exclusivos como el canon digital que ya se aplica en algunos países de
Personalmente, aunque peque de demagogo, estoy con los Devolucionistas. Siempre se ha frenado el avance de los países mas desfavorecidos con argumentos capitalistas. Primero se les da tecnología barata, acceso a Internet, y luego se les pone cortapisas para que sigan pagando patentes y derechos de autor, frenando el desarrollo y el acceso a la cultura universal.
Por otra parte creo que, como dice Barthes, los artistas siempre tienen en cuenta las obras creadas en el pasado y en el presente, y agregan elementos al corpus existente. Esos agregados merecen respeto y admiración, pero sería inadecuado otorgar a sus creadores, intérpretes y productores derechos de exclusividad monopólicos sobre algo que se inspira en el conocimiento y la creatividad que forman parte del dominio público y son producto de la labor de otros artistas.
